Llegó Armando Hart, uno de los fundadores del Movimiento 26 de Julio, ex ministro de Educación y Cultura de Cuba, a hablarnos de la virtud y de la inteligencia, de la maldad y de la estupidez, del amor y del equilibrio del mundo. Con la sabiduría de sus setenta y cuatro años de juventud rebelde, Hart nos propuso trabajar para la salvación de la Humanidad poniendo en primer plano la felicidad, la ética y la solidaridad.

"Hay personas que me dicen que no hay atmósfera para eso, y yo les contesto: no hay atmósfera, pero sí hay subsuelo".

Da gusto oírlo, reclamando el valor científico de la relación entre la felicidad y la virtud, entre la maldad y la estupidez (Bush le sirvió de evidencia suprema). Recordando a Martí afirmó que la justicia es el sol del mundo moral, y transmitió su certeza en la posibilidad de mejoramiento humano.

"Nos encontramos con un problema cultural profundo. Los neoliberales han establecido la doctrina de que la utilidad no tiene ninguna relación con la virtud y eso es falso. Tenemos que colocar en el centro de nuestro pensamiento liberador la relación entre la inteligencia la felicidad y el amor".

Hart hizo una llamada a los científicos sociales, psicólogos, sociólogos, pedagogos para que estableciesen esa relación. Recordó a Martí cuando decía que el socialismo se enfrentaba a dos peligros. La incultura y la inmoralidad, el oportunismo.

"Las revoluciones sociales han caído por falta de ética y de cultura".

"El capitalismo quiebra por la corrupción".

En Cuba la revolución empezó con la denuncia de una enorme corrupción económica y política.

"El socialismo es la suma de cultura, ética, principios fundamentales de derecho y solidaridad".

"Tenemos que recuperar la memoria histórica" — dijo Hart en otro momento de su intervención —. "Yo aprendí la revolución de Martí y de los revolucionarios cubanos de los años treinta".

"Ustedes tienen que recuperar la memoria histórica de la Segunda República".

"Vamos a mover a lo que se llamó izquierda, vamos a buscar la liberación del ser humano, no podemos renunciar a la palabra, a recuperar nuestras palabras".

Estados Unidos — afirmó Hart — ha perdido autoridad y poder en el mundo. Ya no puede utilizar con facilidad los golpes de estado en América Latina. Hay posiciones antiimperialistas en Cuba y Venezuela, y situaciones de cambio en Argentina, Uruguay, México con la candidatura de López Obrador y Nicaragua.

"Podemos hacer un programa con el pensamiento de salvar a la humanidad, la familia humana está enferma. La cultura es un instrumento privilegiado y nos salvará el amor al que tenemos que exaltar como fuerza real, como fuerza científica".

Después de la conferencia, Armando Hart respondió a preguntas del público. Fue el momento de hablar de la democracia en Cuba y de la lucha antiterrorista del pueblo cubano.

Recordó que en los momentos más dramáticos de su país, en los comienzos de los años 90, cuando se produjo la caída de la Unión Soviética y, como consecuencia, el colosal descalabro de la economía cubana privada instantáneamente de todo su intercambio comercial y bloqueada por EEUU, no se adoptó en Cuba ninguna decisión importante sin discusión a fondo en miles de asambleas de toda clase de organizaciones sociales, de fábrica, sindicales, barriales, estudiantiles, de mujeres. Nosotros no creemos en la "democracia multipartidista", creemos en la democracia participativa.

Con el "Yo acuso" de Émile Zola, se dirigió a los EEUU como el auténtico creador e impulsor del terrorismo internacional. El pueblo cubano se manifestará el próximo martes en el Malecón de La Habana para llamar la atención del pueblo común estadounidense sobre este hecho.

"Todo el que proteja a un terrorista es un terrorista", dice Bush, y protege nada menos que a Posada Carriles como su padre protegió a Orlando Bosch, el "pediatra de la muerte".

"Las batallas no pueden ser discretas".

La movilización del martes, de un pueblo totalmente informado y concienciado, responde a una estrategia para influir en la sociedad norteamericana. Esa es la batalla actual del pueblo cubano.

Nota: La conferencia de Hart a la que se refiere esta nota, fue pronunciada en Puerto Real — pueblo solidario — el 14 de mayo del 2005.