Cuba

Una identità in movimento


Una declaración de amor

Gladys J. Gómez Regueiferos


Foto: Luis FranciscoEl fotógrafo italiano Graziano Bartolini sorprendió agradablemente a los presentes, en la inauguración de su exposición fotográfica: "La plaza Vieja 1995-2004"; muestra que fue acogida en la galería de la Fototeca de Cuba, situada en el Centro Histórico de La Ciudad de La Habana, con motivo de la VIII Semana de la Cultura Italiana en Cuba, organizada por el Comité Cubano de la Sociedad Dante Alighieri y auspiciado por el Ministerio de Cultura de Cuba, La Oficina del Historiador de La Ciudad de La Habana y la Embajada de Italia en Cuba.

Pronunció las palabras inaugurales Eusebio Leal Spengler, Historiador de La Ciudad, fluyeron con la habitual fluidez y encanto, al exaltar el arte de Bartolini, no solo estimado como documento testimonial, al atrapar las imágenes de la trascendental Plaza, durante el proceso de restauración, sino también el espíritu ancestral captado del entorno, devuelto a su forma original un lustro después.

Graziano, reportero social, oriundo de Cesena, que ha expuesto además en Pescara, Longiano, Ravenna y otras ciudades italianas y en nuestro país! en la Casa de la Cultura de Plaza de la Revolución, en 1998; pertenece al grupo fotográfico: "Cultura e Immagine" de Savignagno sul Rubicone (FO); confesaba su presunción al enseñar a los habaneros cuán linda era la Plaza Vieja.

Para los cubanos, sus fotografías son una muestra de admiración incalculable, hacia nuestra ciudad, más significativo aun si proviene él de una nación, donde cada piedra y espacio urbanístico es paradigma de la civilización occidental. Si ama nuestra Habana tal como es, única entre esa operada simbiosis de estilos que la muestran antigua y moderna, no rivaliza con nuestro amor, lo comparte.

Bartolini tuvo para ella estas hermosas palabras:

    ... es una especie de celebración, porque La Habana es como una mujer cargada de vanidad frente a un espejo: se pinta los labios, mira su belleza, aún descubriendo sus arrugas...

    A La Habana le podemos cantar canciones antiguas, intentando seducirla; con un bolero del Benny, un rap de los Orishas, una canción de Carlos Varela o de Frank Delgado... es una especie de auto celebración, porque La Habana es como una mujer cargada de vanidad frente a un espejo: se pinta los labios, mirando su belleza, aún descubriendo sus arrugas...

    No cambia mucho. Siempre al final, descubrimos un acto, una declaración de amor. No puede ser otra cosa.


Fotografías de Graziano Bartolini

 

 

 

Más información: www.mescalina.com/grazianobartolini/home-page.htm





Fuente: http://www.caimanbarbudo.cu/caiman331/paginas/bertolini31.htm

EL CAIMAN BARBUDO. Edición digital


Página enviada por Graziano Bartolini


Cuba. Una identità in movimento

Webmaster: Carlo NobiliAntropologo americanista, Roma, Italia

© 2000-2009 Tutti i diritti riservati — Derechos reservados

Statistiche - Estadisticas